Leña apilada en Valladolid
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  • Comentarios desactivados en Cómo preparar y almacenar la leña y la biomasa para el invierno

Con la llegada del frío, no hay nada como el calor de la leña ardiendo en casa. Pero para disfrutar de un hogar cálido, la preparación empieza mucho antes. Durante la primavera y el verano, es importante cuidar cómo se almacena la leña y la biomasa para que estén en perfectas condiciones cuando llegue el invierno.

Desde Leñas Jesús, te contamos cómo hacerlo paso a paso

1. Guarda la leña en un lugar seco y bien ventilado

La humedad es el principal enemigo de la leña. Si se moja, pierde poder calorífico y se vuelve más difícil de encender. Además, puede generar moho y hongos.
El mejor lugar para almacenarla es bajo un tejado o cobertizo, separada del suelo y con buena ventilación para que el aire circule entre los troncos.


2. Mantén tu leña ordenada y limpia

Una buena organización facilita el acceso y evita accidentes. Apila los troncos en filas estables y deja espacio entre ellas para que el aire fluya.
Mantén la zona libre de restos de corteza, hojas o suciedad, evitando así la aparición de insectos o roedores.


3. Protege tu inversión

La leña y la biomasa son una inversión en confort y ahorro energético. Utiliza lonas o cobertores transpirables para protegerlas de la lluvia o el sol.
Revisa periódicamente tu reserva y, si notas humedad o deterioro, airea la zona o reemplaza las piezas dañadas.


4. Planifica con antelación

No esperes al primer frío para comprar o preparar la leña. Hazlo en primavera o verano, cuando hay más disponibilidad y puedes dejarla secar adecuadamente.
Una buena planificación te garantizará calor suficiente para todo el invierno.


5. Elige siempre leña de calidad

No todas las maderas arden igual. Las maderas duras como encina, roble o haya ofrecen una combustión más duradera y eficiente.
Asegúrate de que la leña esté bien seca y proceda de fuentes sostenibles. Así lograrás un calor limpio y estable.


6. Usa recipientes y soportes adecuados

Para el interior del hogar, emplea cestas o leñeros que faciliten el transporte y mantengan el espacio limpio.
Si la guardas en el exterior, opta por estructuras metálicas o de madera tratada, resistentes a la intemperie y con buena ventilación.


7. Almacénala lejos de fuentes de calor

Por seguridad, evita colocar la leña cerca de chimeneas, estufas o calentadores. También conviene mantenerla separada de la vivienda o garaje para prevenir incendios.


Conclusión

Preparar tu reserva de leña y biomasa con tiempo es clave para disfrutar de un invierno cálido, eficiente y seguro.
Con una buena organización y un almacenamiento correcto, aprovecharás al máximo cada tronco.

Y recuerda:
En Leñas Jesús te asesoramos para conservar y proteger tu leña o biomasa de la mejor manera.
Llámanos o visítanos, y te ayudaremos a preparar tu hogar para el próximo invierno.